La orquesta llega a Buenos Aires, Argentina, con un ámplio repertorio clásico y nacional; con un mensaje de afianzar sonidos para la construcción de paz en Latinoamérica.
Argentina y Marruecos regresaron al campo, ya sin hinchas en las gradas, para disputar tres minutos de tiempo añadido dos horas después de que el partido fuera dado por terminado.