En RTVC Noticias te ofrecemos algunos consejos prácticos y sencillos para reducir el consumo de energía en tu hogar.
Te ha pasado, seguro. Muchas veces estás en casa y te preguntas cómo puedes ahorrar en la factura de la luz o cómo ahorrar energía en la casa para ayudar al planeta. Entonces, llegas a la conclusión que es imposible ahorrar energía en casa; sin embargo, no es así. En este artículo te brindamos cinco recomendaciones prácticas y sencillas para bajar el consumo.
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5 Recomendaciones para aprender cómo ahorrar energía en la casa
1- Aprovecha la luz natural
Aunque parece obvio, adoptar hábitos como el de abrir las cortinas de tu casa y permitir la entrada de luz natural, en el largo plazo representará un ahorro considerable en el consumo de energía.
La razón salta a la vista. Mientras aprovechas todas las horas de sol del día para iluminar tu hogar, tienes la oportunidad de apagar la luz artificial, lo que a la postre significa una reducción en su uso.
Ten presente que para sacar el máximo provecho a la luz natural puedes apoyarte en espejos, que por su poder reflexivo tienen la capacidad de expandir la luz solar hacia todas las direcciones; cortinas claras o semitransparentes que permiten el ingreso de luz, o paredes y muebles blancos, que también aportan su poder reflexivo.
2- Pásate a bombillos LED
La tipología de los bombillos que eliges incide en el consumo de energía y en el costo de la factura de la luz. Es por esto que te recomendamos reemplazar los bombillos incandescentes por bombillos LED.
¿Por qué? Además de necesitar mucha menos energía para su funcionamiento, las luces LED brindan la misma cantidad de luz que las incandescentes y tienen un tiempo de vida más largo (9 años en promedio).
Otra buena práctica, complementaria al cambio de bombillos, consiste en reducir el número de bombillos en tu hogar.
3- Apaga las luces
Este consejo para el ahorro de energía en casa es el más sencillo de todos: ¡Apaga las luces que no necesitas! Resulta obvio, pero esta recomendación es una de las más importantes y representativas en términos de reducción.
Así que te sugerimos que apagues la luz cada vez que salgas de una habitación, dejes la sala o simplemente ya no estés en un determinado lugar de tu casa.
Enciende solo las luces que necesitas, apóyate en la luz natural y recurre a elementos como lámparas que te ayudarán a desarrollar tareas específicas, como leer, sin tener que iluminar toda una habitación.
4- Optimiza el uso de tus dispositivos
Un consejo más para el ahorro de energía, muy sencillo de llevar a cabo, tiene que ver con la optimización de tus dispositivos y electrodomésticos, es decir, la forma cómo los utilizas o cargas.
Por ejemplo, suele ser una buena práctica recargar la batería del celular en modo de avión, para que el tiempo de conexión a la fuente eléctrica sea menor.
Otro hábito que puedes adoptar es evitar dejar los aparatos eléctricos en modo ‘standby’ o lo que es igual a mantenerlos conectados a la espera de que con solo tocar un botón vuelva a funcionar sin tener que enchufarlos o encenderlos nuevamente.
Ya con electrodomésticos como el horno o la nevera, se recomienda, en el primer caso no abrirlo varias veces mientras está en uso, y para el segundo, evitar abrir y cerrar con mucha frecuencia para que así conserve su temperatura de refrigeración.
Se trata de pequeñas acciones que pueden marcar la diferencia en la factura y contribuir con la reducción del impacto ambiental.
5- Toma duchas cortas
En caso de que tu ducha sea eléctrica o incluso si funciona mediante calentador a gas, te recomendamos tomar baños cortos.
Sabemos que perder la noción del tiempo o pasar un largo tiempo bajo el calor abrasador del agua es tentador. Sin embargo, un par de minutos son suficientes para que quedes bien aseado.
Cuatro trucos para lograrlo son: mide el tiempo que dura el baño, cierra la llave mientras te enjabonas, instala dispositivos ahorradores y regula la presión del agua, evitando abrir la llave a su máxima capacidad.
Como ves, resultan sencillos y muy prácticos estos consejos para ahorrar energía e incluso agua, minimizando el impacto ambiental y alcanzando ahorros de dinero considerables.
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