Darío Escobar vive rodeado de monasterios en el Líbano.
En el norte del Líbano vive alguien que ha generado una de las historias más curiosas. El protagonista es Darío Escobar, un sacerdote colombiano que tiene más de 23 años completamente aislado del mundo. En una entrevista que reseña Infobae, a partir de una charla realizada por el español Sergi Unanue a través de su canal de YouTube, Los Viajes de Walliver, se cuentan los motivos por los que eligió esta forma de vida y cómo transcurren sus días.
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“En la casa donde vivo hay cuatro cuartos, chimenea, todas las comodidades, yo digo que esto no es un eremitorio que sea para un ermitaño, pero bueno, yo tuve que venir aquí obligado porque ya a mis años la gente del pueblo me robaba mi turno de agua, entonces para no pelear con la gente, me vine para acá”, cuenta. Escobar, quien tiene 88 años y lleva más de 33 viviendo en el Líbano, explica que para llegar a estas capacidades se necesita cumplir con varios requisitos. Ser hombre mayor de 40 años, tener buena salud, ser considerado un monje ejemplar y que haya permanecido durante 10 años en un monasterio tras hacer los votos solemnes. Sin embargo, el sacerdote colombiano Darío Escobar solo había tenido ocho años.Un sacerdote colombiano muy diferente
“Me sacan cuentos, historias raras, milagros que uno no ha hecho”, sentencia. El padre colombiano dedica 14 horas al día a orar, trabaja la tierra otras tres y dos más para estudiar.Puedes leer: Máscaras ancestrales Kogui se convierten en símbolo de esperanza y paz
¿Cuándo duerme? De 7:00 p.m. hasta las 12:00 a.m.; es decir, solo cinco horas. “Uno aquí no se siente solo, siempre ocupado y siempre contento”, relata este sacerdote colombiano. “Aquí no hay noción del mundo, no hay teléfono, ni radio, ni televisión, las noticias que conozco son porque las personas me las cuentan, soy un enamorado del fútbol y todos los mundiales me los he perdido aquí, me entero de los resultados porque las personas me los cuentan”, complementa sobre su vivir diario.