Entre enero de 2010 y mayo de 2011, los condenados montaron un fraude con cheques emitidos por servicios de salud que nunca se pagaron a beneficiarios ni prestadores.
Según un estudio de la Cámara Colombiana de Comercio Electrónico (CCCE), más del 30% de los compradores en línea han sido víctimas de intentos de fraude.
La denuncia alega imprecisiones en sus declaraciones ante la Fiscalía y la Corte Suprema de Justicia en el marco de la investigación por el desfalco de la UNGRD.