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Así fue la balacera que terminó en el robo de $100 millones en Bucaramanga

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El hecho se registró cerca de una base militar.

La millonaria diligencia bancaria que realizaron los hijos de un ganadero residente en el barrio Los Pinos de Bucaramanga, hacia las 3:00 de la tarde de este viernes, parecía finalizar sin mayores contratiempos. Ya estaban en la puerta de su casa cuando, con una precisión milimétrica, dos hombres armados, en moto, los emboscaron. Fueron por la mujer que llevaba el dinero. Iba ‘marcada’ como dicen en el lenguaje delictivo, es decir, sabían exactamente quién llevaba el efectivo, quizá hasta la cifra exacta del retiro hecho en la sucursal del BBVA de Cabecera del Llano: $100 millones. El monto era suficiente para apostarlo todo, hasta la vida misma.

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Uno de los delincuentes bajó por el andén, se le abalanzó a la mujer, la estrujó, la encañonó y le arrebató la cartera mientras ella parecía ‘colgársele’ a ella. El delincuente, con el casco protegiendo su identidad, la apuntaba de frente. De inmediato el escolta que los acompañaba reaccionó. Se le lanzó al delincuente, forcejearon y, como una escena dramatizada, aquella arma (quizá un revólver) se disparó. “Eran dos tipos; uno iba vestido de blanco y el otro de negro. El que se quedó en la moto cuando vio la resistencia también sacó un arma”, se escuchó entre los relatos de los pocos vecinos quienes minutos después, a fuerza del despliegue de Policía, se dieron cuenta que había ocurrido un asalto en el apacible barrio que se nutre de la ‘seguridad’ que les da estar tan próximos a la artillería. Sí, fue un atraco descarado, osado, teniendo en cuenta que de manera literal las instalaciones de la Quinta Brigada del Ejército están a unos metros.

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Se diría que el asalto fue a ‘espaldas’ de la unidad militar. Solo a media cuadra se ve el puente que atraviesa de un lado a otro la guarnición. Pero aquellos forajidos no temieron, o quizá también sabían que por asuntos de injerencia los militares no entrarían en choque con un tema que les era ‘ajeno’. Una fuente de la firma que de vez en cuando les presta servicios de seguridad a los comerciantes, dijo que por coincidencia aquel protector no llevaba arma, porque preciso están en proceso de renovación de los permisos. Aún así, intentó defender a los jóvenes a quienes decidió acompañar de ida y vuelta en un vehículo. Pero recibió un impacto que lo atravesó de pecho a espalda. Dos horas después las autoridades informaron que estaba recuperándose. Colprensa - Vanguardia