Una creciente tensión se vive en el sector del transporte del país. Mientras se acerca la fecha prevista para el paro nacional de camioneros, representantes de los pequeños y medianos transportadores, quienes constituyen el 80% del gremio, han alzado su voz para expresar su desacuerdo con la movilización.
Según ellos, la huelga ha sido impulsada por grandes empresarios del sector que, además de promover la protesta, son responsables de la explotación laboral que muchos conductores enfrentan.
Arsi Ramírez, uno de los principales voceros de este grupo, expresó que “no estamos de acuerdo con este paro porque es convocado justamente por empresarios del transporte que han desplazado a los pequeños y medianos transportadores. Nosotros no podemos apoyar un paro en contra de los precios del ACPM; hay muchos factores que están afectando a las finanzas del Estado”.
Ramírez también denunció que se están ofreciendo pagos de hasta 150.000 pesos a los conductores para que participen en la manifestación.
A través de grupos de WhatsApp circula información que sugiere que estos montos se ofrecen a quienes se sumen al paro, lo que refleja, según Ramírez, un intento de coerción hacia los trabajadores, quienes temen perder sus empleos si no se adhieren a la protesta.
#ElCalentao🥘| 🚦El 80% de los camioneros del país son medianos y pequeños transportadores, quienes se oponen al paro que promueven, según ellos, sus patrones. Quienes también promoverían la explotación laboral.
Los detalles junto a @EdwinTuiranSanc.
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Por su parte, Luis Rodríguez, otro representante del gremio de pequeños y medianos transportadores, destacó que la afectación en la canasta familiar, lejos de lo que se ha especulado, será mínima y no del 35% como afirman algunos sectores.
“Los especuladores se han valido de esto para subir indiscriminadamente los precios de la canasta familiar. Esperamos que el gobierno tome medidas para mitigar el aumento”, subrayó Rodríguez.
El debate sobre el precio del ACPM ha sido central en esta controversia. Aunque el costo de este combustible ha permanecido congelado durante los últimos 56 meses, desde Anif se ha señalado que, considerando la inflación acumulada desde 2020, el precio por galón debería ser $3.600 más alto.
Eliminar el subsidio al ACPM, aunque tendría implicaciones significativas para los transportadores y otros sectores económicos, es visto por muchos como una medida necesaria para la sostenibilidad fiscal del país.
Con una inflación en descenso y unas finanzas públicas en situación crítica, mantener el subsidio implicaría cubrir el déficit mediante un subsidio cruzado entre la gasolina y el ACPM, o forzar al gobierno a destinar recursos del Presupuesto General que podrían ser utilizados en otras áreas más urgentes.
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